sábado, 19 de noviembre de 2011

CUANDO LA MENTE ESTÁ OCIOSA

Lo que voy a escribir hoy quizás suene a triste, pesimista y en algún que otro pasaje puede que sea hasta demasiado personal. Pero no me importa, lo escribí sumida en un estado de mucha melancolía, supongo que debido al sitio en donde me encontraba. Aquí se mezclan estados de ánimos, mis ambiciones profesionales y un poco las personales. Están  escritos en diferentes momentos y horas de algunos días, otros ni siquiera había nada que decir. 



9/11/11, 14:00


El valor de la libertad. No me hizo nunca falta estar privada de ella para saber lo valiosa que es, pero estando ausente en estos días es cuando más valor cobra para mí.
No soporto estar más de dos días sin ver el sol, sin respirar aire puro, no puedo estar dos días seguidos sin ver  a los que amo, quiero o aprecio. Y en estos últimos días en los que parece que la Madre Naturaleza se ha enfadado conmigo y me tiene atada a una cama entre cuatro paredes, a punto he estado si no de perder la razón, sí los nervios.
Aquí en compañía de la soledad , el dolor, el abatimiento y la desesperanza, mis sueños han estado a punto de desmoronarse para siempre. ¿Otra vez? me dije.
¿Por qué el destino se empeña en ponérmelo tan difícil? ¿por qué cuando supero una prueba ya tengo otra en la puerta? ¿no tengo derecho a una tregua?, ¿no puedo ni tan siquiera optar a alcanzar mi sueño?

Tenía tantos planes en mente, tantas cosas por hacer e intentar a corto plazo que parece que la vida se empeña en decirme:
Se acabó, ríndete, no lo hagas no vale la pena. Y casi lo consigue.

Hoy ha sido un día especialmente triste, si bien no me he sentido abandonada por los míos, si me he sentido abandonada por el UNIVERSO. Soy una persona muy positiva y enérgica pero hay veces que el cuerpo puede contigo y no te quedan más fuerzas ni ánimos, y contra eso no hay nada que hacer. ¿O sí?
A pesar de haber tenido unas últimas horas muy triste, vuelvo a sacar fuerzas de, no me preguntéis donde, porque no sé de donde salen. Y me he dicho que esto forma parte de mí y que no me puedo rendir, que esto, con lo que llevo luchando treinta años no va a acabar conmigo en treinta días, que tengo por delante un SUEÑO con mayúsculas, y que si he sido capaz de esperar veinte años para ello y ahora he encontrado el momento, no voy a dejar que la tristeza que me inunda hoy, acabe con él.
Seguiré adelante, ya está en marcha y no lo puedo ni lo debo parar.

9/11/11, 16:00


Aquí observando a cada persona sin hablar con nadie se puede aprender tanto de ellos y al mismo tiempo adivinar sus más profundos sentimientos.
Miro al frente y veo la impaciencia en alguien joven que no soporta la espera, al fondo veo en una anciana la sumisión , la aceptación de un estado en el que o te dejas llevar por él o entras en la deseperación. Acaba de llegar alguien que refleja el nerviosismo y la inquietud, del otro lado veo la exigencia, en otros la intolerancia, y en la mayoría de nosotros reside la soledad, la sumisión, la tristeza, el dolor y rayamos todos la rendición.
Hemos pasado a ese estado en el que dependemos de otras personas, de su buena fe, buena predisposición y profesionalidad. Aún así todos intentamos no perder el rumbo, y unos procuramos no olvidar el día en que vivimos y otros no olvidar quienes son ellos mismos.

10/11/11, 15:00


Otro día más aquí, en donde se aprenden a la vez tantas cosas, a valorar el tiempo, aquí donde paradójicamente lo estoy perdiendo aunque otros me digan que estoy ganándolo para sanar, yo lo estoy perdiendo. No he podido disfrutar del sol radiante que ha hecho hoy, ni darme un paseo por el río que tanto me gusta.
Echo de menos mi música.

10/11/11, 22:45


Vuelvo a mi soledad, esa que tantas veces he buscado voluntariamente, hoy me vuelve a ser impuesta. Otra noche más, o menos como dirían los pesimistas. Añoro mi casa
¿Por qué es siempre en estos momentos en los que nos planteamos nuestras vidas?. Pasado, presente y futuro. Te planteas vivir el presente con más pasión, más ardor. Cada día que paso aquí sin hacer nada es presente perdido para convertirse en pasado. ¿Y qué decir del futuro?, te dices a tí misma que ya no volverás a hacer tal o cual cosa nunca más para intentar arreglar mañana aquello que no supiste, quisiste o pudiste hacer hoy. Porque a veces no es solo querer, también es saber o poder. Todos tenemos algo pendiente, esa asignatura que nos quedó en el aire, que ni siquiera intentamos. ¿Como queremos salir airosos de algo que ni tan siquiera hemos intentado?.

11/11/11, 10:25


Después de una noche un poco agitada en la que todo señala que vas a quedarte aún unos días más aquí, viene la mañana, una mañana cansada, dolorida.
El silencio ayuda a pensar.

11/11/11, 12:20


Dicen que el universo nos concede aquello que deseamos si lo hacemos con todas nuestras fuerzas. ¿De verdad eso es así? ¿Cúal es la fórmula para que eso ocurra?. Soy positiva, optimista y deseo con todas mis fuerzas algo que no ocurre en mi vida. Además de positiva y optimista, ¿debo ser egoista? ¿o quizás mi deseo no depende solo de mí y del universo, sino de algo o alguien más dispuesto a hacerlo realidad?.
¿O quizás debo desistir de él de una vez por todas?. A veces es la mejor solución, desistir, pasar página, en definitiva, OLVIDAR.
Olvidar lo vivido, lo soñado, lo imaginado, lo bueno, lo malo. Apartar de mi mente ese pensamiento que ocupa casi su totalidad.
¿Olvidar es rendirse?, posiblemente. Es dar paso a otros pensamientos otras ocupaciones. Siento rabia, impotencia, pero eso no me hace conseguir lo que quiero, solo adentrarme más y más en mi dolor.

Quien sabe si en algún punto del planeta a miles de kilómetros de aquí, en algún determinado momento de un día cualquiera, alguien me imagine aquí tumbada en una cama escribiendo esto e intentando olvidar algo que no debió conocer nunca porque nunca le perteneció.
Es curioso como cuando el destino te pone las cosas al alcance de la mano no las sepamos atrapar con fuerza para que no se escapen. Y como casi malignamente la vida te vuelve a dar una sacudida fuerte para que veas como vuelve a pasar por delante de tí algo que, aunque hecho especialmente para tí no te estaba destinado, y la vida y el universo se ríen a carcajadas viéndote ahí sin poder hacer nada para que no se vuelva a escapar.

12/11/11, 14:55


Hoy está soleado, mi humor y mis ánimos son más positivos, aunque ser positiva aquí encerrada es difícil, lo intento. Intento pensar que todo va a salir bien, y que si algunas cosas que deseo no salen como imaginaba, las que tenga a mano serán de lo mejor. Que quiero seguir intentándolo y soñando. Soñar es quizás el verbo que más me gusta y el que mejor me define,SOÑADORA. En mi mente suena una música, no estoy loca, simplemente no tengo aquí ningún reproductor y las notas de ciertas canciones se mueven por mi cabeza a su antojo, suenan una y otra vez y al sonar pasan las imágenes, las pasadas, las presentes y las soñadas.
Te veo, te veo en aquella casa, te veo aquí a mi lado, al otro lado del teléfono, en la calle, ahora, antes.....

Dices que hay sabores y olores que no se olvidan, me citas a la Madeleine de Proust, que hay  sensaciones que siguen en tu mente.Yo no puedo olvidar algunas imágenes, las tengo grabadas a fuego en mi mente, gestos, sonrisas, miradas que no olvidaré jamás, tampoco  pienso en sacarlas de mi cabeza.
Esas imágenes alimentan mi sueño, mis recuerdos, son míos, tuyos y los saco cada día para recrearme en ellos un rato y luego los vuelvo a guardar con sumo cuidado en un lienzo fino dentro de mí.
Para mí.... Para tí.....

Cada noche pienso que estás aquí a mi lado, me susurras al oído buenas noches y lo siguiente que veo es......
......... El amanecer




Chewing

2 comentarios:

  1. Soñar, una palabra que define tanto mi vida, que la llevo en mi piel.
    Nunca dejes de soñar, es tan bonito, que aunque a veces no consigues tus sueños, te conformas con verlos en tu mente. Y lo más bonito de que no se hagan realidad, es que solo tú puedes verlos, y solo tú sabes la razón por la que quieres seguir luchando por ellos.
    Te quiero

    ResponderEliminar
  2. Debes haberlo heredado de tu madre seguramente, soñar es bueno y bonito siempre que se sepa que se está soñando.Seguiré soñando, por mí, por tí, por tu hermano y por poder sobrellevar los momentos perdidos. Yo también te quiero princesa.

    ResponderEliminar